La presencia constante La espera innecesaria La ansiedad que me invade y me hace invadir Por la piel me brotan las sensaciones que son inexplicables La garganta duele Las lágrimas brotan sin razón alguna Obligarme Desarmarme Vagar por lugares Encontrarme conmigo Profundizar las emociones No siempre es placentero.
Me encuentro haciendo lo mismo de siempre Algo cambió Las fichas se movieron Todo ese tiempo todo ese silencio todo derramado en mi cama Se van alejando lentamente por la ventana Mis brazos ya no duermen solos Mis ojos pueden mirar tranquilos Mi cuerpo volvió a ser cálido Pude disfrutar de ese sol que tanto deseaba
Es que no soporto el silencio, ese, incómodo las miradas no dicen nada el aire se vuelve espeso Se entromete en mi piel, como un mosquito que pica y me convierto en la espesura que recorre el aire se mueve, se contrae, se retiene..