Las nubes corrían detrás del sol como jugando a las escondidas
Los días pasaban como si nada sucediera
Me senté a mirar las horas pasar
El mate se lavaba una y otra vez
Las palabras renunciaban a mi boca
Me senté a entender
pero el razonamiento no hablaba
La almohada cansada de soñar
y las flores brotando de color
Me senté a mirarlos
uno por uno
caminando al azar
saliendo de sus casas
sonriendo a los demás
Cayó la luna,
salí despedida de la tierra